Barrio de La Recoleta

Reconocido como uno de los barrios más elegantes de la urbe porteña, su término surge gracias a la existencia del convento de los recoletos descalzos. Conformado por destacada iglesia, un cementerio que alberga los restos de personajes históricos y avenidas con cafés, restaurantes y comercios de categoría exclusiva…

Antiguamente, el convento de los recoletos descalzos, fundaron en 1716, su monasterio sobre la base de una chacra, donde en la actualidad, responde a la iglesia del Pilar.

Transcurrido un tiempo, el edificio donde se encontraba instalado el convento, se convierte en el hospital de Buenos Aires, para en el año 1858, transformarse en un asilo de mendigos.

Luego, con Bernardino Rivadavia como ministro, se decide remodelar el sector de estas tierras, para definir el posterior funcionamiento del que sería hasta nuestros días, el cementerio de la Recoleta. 

Por su riqueza arquitectónica y estética plástica, compare su importancia con el continente Europeo, conformado por un total de 5 hectáreas, y un conjunto de esculturas, estilos ambiguos y bóvedas.

Entre los máximos exponentes de la historia, descansan allí, los restos de Eva Perón, Juan Manuel de Rosas, Horacio Quiroga, Sarmiento, José Hernández, y demás figuras que supieron brillar en diferentes ámbitos, atravesando la línea del tiempo, plasmando su huella inmortal.

En oposición a la temática anterior, nos enfrentamos con la vida, el bullicio ambiental de los transeúntes, el tiempo, las ocupaciones, representando a la famosa y distinguida Avenida Alvear, es considerada una de las calles más lujosas de la ciudad, conformada por restaurantes, cafés, bares, hoteles y locales de indumentaria y accesorios de marcas exclusivas, a nivel nacional e internacional.

Además, este barrio posee dos plazas importantes, una es Vicente López, situada sobre la Av. Las Heras, y la otra, Rodríguez Peña, quienes les han sido adjudicadas en memoria de los tantos personajes claves del país.

También entre sus perímetros, pueden hallar a la imponente biblioteca nacional, declarado patrimonio de interés cultural, dado su jerarquía temática.

Un privilegio resulta ser para quienes han podido vivenciar el tiempo en que el afamado escritor Jorge Luis Borges, solía atender a todo aquel individuo que se llegara hasta la biblioteca, ya que tendría la dicha de entablar una conversación con esta figura.

El material que atesora la biblioteca, es infinito y diverso en cuanto a la calidad y cantidad de libros, textos, archivos y cintas audiovisuales que datan de sucesos como el regreso de la democracia al país bajo la presidencia de Alfonsín, otros tantos como el descubrimiento de América, un ejemplar de la divina comedia de Dante Alighieri, el quijote de la mancha y Martín Fierro.