En su recientemente restaurado interior, conserva el equipamiento original de las salas de atención al público, valiosos cerramientos de Vitraux y un importante patrimonio histórico artístico, integrado por esculturas de M. Fiot, M. Chirico entre otros, y pinturas por Bernaldo de Quirós y Lola Frexas.
El Palacio de Correos y Telecomunicaciones de la ciudad de Buenos Aires, popularmente conocido como Correo Central, está ubicado en el barrio de San Nicolás. En 1888 el presidente de entonces, Miguel Juárez Celmán aprobó el proyecto para su construcción. En principio fue diseñado por el arquitecto francés Norbert Maillart para ser la sede del Correo Central de la Argentina pero en 1908 el proyecto fue reformulado para dar lugar a la inclusión de nuevos servicios y calles peatonales aéreas las que nunca se realizaron.
En el año 1997 fue declarado Monumento Histórico Nacional debido a su calidad arquitectónica, su importancia histórica y por las obras de arte que se hallan en su interior.
En 2003 dejó de utilizarse como Correo Central y en 2005 el Gobierno Nacional resolvió convocar a licitación para convertirlo en un centro cultural como parte de las celebraciones del bicentenario de la Revolución de mayo de 1810. El 24 de mayo de 2010 fue inaugurada en este edificio la primera etapa del Centro Cultural del Bicentenario. Actualmente está cerrado al público, mientras continúan las obras de remodelación.
Para resaltar la riqueza arquitectónica del edificio la Dirección de Paseos de la Comuna en 1983 (año mundial de las comunicaciones) inauguró la plaza del Correo en un solar, de 6.534 m², que queda enfrente de la entrada principal del edificio.
Sobre dicha plaza se encuentran, sobre la calle de la entrada principal al Palacio, algunas esculturas relacionadas con el correo. Una de ellas, costeada por los Telegrafistas Argentinos y Empleados del Palacio del Correo es una escultura creada por el belga Luis Bruninx en homenaje a Samuel Morse, inventor del telégrafo, realizada en 1915 y que originalmente se hallaba en el hall central del Palacio del Correo.
Un bajorrelieve en bronce con la figura del chasqui (correo a caballo de la época de la colonia) es obra del escultor argentino Mario Rubén Chierico.
También hay una escultura denominada El Cartero, del ítalo argentino Salvador Gurrieri, que muestra el cuerpo entero de un cartero llevando la correspondencia.
Además de estas esculturas hay un mástil que reemplaza desde la remodelación de la plaza al erigido en 1938 por la Dirección General de Correos y Telégrafos.
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